jueves, 20 de junio de 2013

Excavación

Desgarro la piel de mi brazo izquierdo
Observo los contornos de mis flácidos músculos
El color rojo brillante de la sangre
Y la oscuridad de lo más profundo.
Quiero indagar más,
tomo un bisturí bien afilado
retuerzo aún más las fibras
y deshojo las capas para mirar que
Llego a nivel de una dura cubierta blanca
que intento rebanar y no logro penetrar.

Le entierro una y otra vez el bisturí
hasta lograr rayar esa pared
y veo que más sangre sale de ahí
Le escupo para despejar todo el fluido
Curiosa de observar que más encuentro,
pero por más que intento, no logro percibir que tengo.
Decido que el bisturí no es suficiente,
entonces con un machete
comienzo a talar el hueso
machetazo tras machetazo

Hasta descubrir que ahí no está mi alma...


2 comentarios:

Anónimo dijo...

Bastaba con saber que es impalpable, que ahí está pero no la verás nunca. No tiene color -parece- pero tiene esencia... la tuya.
Tal vez si fuera tan fácil hallarla, hace mucho que varios la habrían eliminado.
No lo crees?


Skm.

Anónimo dijo...

me encantó *-* tu lo escribiste?