Recuerdos...

Mi corazón arde con las palabras que aún retumban en mi memoria
Quería que me llamases, pero el teléfono jamás sonó
A veces paseo sola por las plazas que recorrimos juntos...
Recuerdo las melodías que escuchabamos en tu habitación,
ambos mirando el techo, recostados en tu cama.
Aquéllos tiempos de muchachos inmaduros...

Ya han pasado más de 3 años, y aún tu silueta vaga por mi mente
Nunca te dejé alcanzarme, y terminaste siendo barrido por el viento
A veces me recriminas por cosas que jamás sucedieron e imaginaste
No hay nada que hacer contigo, sólo guardarte en mi imaginación
y dedicarte unos escritos con tu esencia de hombre
Como si no lo notases, tu continuas en mis pensamientos...

¿Eres feliz con ella? ¿Es mejor que la señorita melancólica?
Espero que lo seas, a pesar de que a veces sigues intentando enamorarme
Sé que puedes hacer daño, así como yo te lastimé, ambos sabremos esconder las viejas heridas
Me gusta que me hagas sangrar hasta tornarme anémica
Todo en nombre de las memorias que revives
porque son preciosos, todos esos recuerdos.



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Este es un poemilla que se me ocurrió mientras caía la nostalgia de mi primer amor... Aunque despues se volviese realmente desagradable hablar o saber de él... Los buenos momentos los conservo intactos

Me duele la cabeza... Bisexual de closet

De tanto leer comics, creo que se me cocinaron algunas neuronas y me provoca pesadez de cabeza...
A la vez, me despierta el bichito que me pide a gritos que escriba tonterías, así que le haré caso:

Conversando con un amigo en la mitad de la madrugada, se me soltaron los dedos y comencé a escribir sobre algunos de mis pensamientos más profundos, con respecto a ciertas preferencias físicas por el sexo femenino.
Es normal que una mujer que se considera heterosexual, le fascinen tanto los pechos femeninos? ... Y si alguien me respondiese que sí y es hombre...dígame... alguna vez uds han pensado en penes y lo consideran normal considerandose heterosexuales?
Personalmente considero que si soy heterosexual, deberían sólo gustarme los fisicos masculinos, pero en mi caso no es así, me gusta mirar fotos o dibujos de pechos femeninos o mujeres en poses sexys...
Sin embargo, nunca me he besado, tocado indecorosamente ni acostado con una mujer... So.... ¿qué es esto, entonces? Simple admiración por atributos femeninos? (Seguramente más de algún lector@ ya debe estar imaginándome con camisa de fuerza, escribiendo desde un sanatorio)... Por otro lado, imaginarme con una mujer en la cama me produce rechazo, pues no me gustan las vaginas... BrrRrrRr...

Hablemos ahora de los hombres? Qué cosas me gustan de los hombres? Pues la verdad no me agrada para nada el pene, de hecho estéticamente lo encuentro sumamente feo y asqueroso... Me gustan mucho las espaldas anchas o que se les noten los biceps... También me gustan altos, delgados o con ligero sobrepeso (gordos no) y de bonita dentadura.
Encuentro cercano con hombres he tenido si que sí (no relaciones sexuales)y lo que más me agrada es un hombre que sienta 100% hombre, masculino y/o varonil... No esos tipos que parecen más un niño mimado o medios fletines.
Entonces basada en esas ideas locas? Qué diablos busco?: Imagine por unos instantes un hombre con pechugas, pero lo deseche ipso facto ...

¿Soy bisexual aún no experimentada? ¿O simplemente una heterosexual con ideas distorcionadas? No tengo idea...

Una cosa si es cierta, si tuviese que escoger algo 100% serio y formal, prefiero mil veces un hombre que una mujer... "¿Por qué?" me preguntó hace mucho tiempo una mujer lesbiana, a lo que respondí que el hombre entrega muchas cosas que en una mujer no creo poder encontrar: Seguridad, protección y descendencia.

Vuela imaginación... vuela!

Te envolvería con mis manos, abrazandote más que con mi cuerpo con mi alma, comenzaría a recorrer tu cuello a besos hasta llegar a tus oídos y decirte algunas cosas en susurros.
Luego buscaría el camino a tus labios con mis ojos cerrados... Desde la comisura de tus labios para comenzar a besarte suavemente, avanzando lentamente hacia el centro de ellos a medida que mi corazón palpita cada vez más rápido.
Me gustaría besarte tal como lo he deseado muchas veces, buscando desesperadamente tu lengua para que juegue con la mía, como verdaderos amantes dandonos ligeros mordiscos, y mis manos ya no pudiesen sólo abrazar tu espalda, pues empezarían a recorrer tu silueta de mujer, posándose en tus nalgas, apretándolas delicadamente para no asustarte y atrayéndote más cerca de mí, para que sintieses como mi miembro viril se comienza a despertar, no por tus nalgas, sino por los besos apasionados que nos estaríamos dando.
Si me lo permitieses, te llevaría besándote a mi cuarto, para colocarte en mi cama y, estando encima tuyo, poder desvestirte y seguir besando ya no sólo tus labios, sino también tus brazos, tus pechos, tus pezones, tu abdomen...
Con mis manos me gustaría recorrerte, explorar todo tu cuerpo hasta llegar a tus muslos y ligeramente tocar tu femeneidad, sentir como te humedeces, jugar con tus fluídos alrededor de tu clítoris con movimientos circulares, poder descender un poco más y entrar con mis dedos en ti suavemente, buscando provocarte más placer y más humedad... Entrado y saliendo, progresivamente... Progresivamente aumentando la velocidad con cada suspiro tuyo.
Comencé a imaginar que mientras yo te hacía disfrutar, tu me recorrías hasta llegar a mi pene ya erecto por toda la escena y que lo tocabas sobre mi pantalón, luego que bajabas el cierre y que comenzabas a masturbarme, envolviéndolo en tus delicadas manos y realizando movimientos de arriba y abajo a distintos ritmos provocando más mi erección... Mientras que con mis manos seguía tocándote en un proceso de placer mutuo.
Sólo imagina mis manos en tu vagina y que yo pudiese tocar tus pechos...

Te quiero.

Quiero estar a tu lado por lo que llenas mi vida y por lo que quiero llenar la tuya... No es el sexo lo que nos une, pues sólo lo he imaginado... Es el cariño que nos tenemos. Eres una gran mujer y agradezco que llegaras a mi vida.

Me gustaría en este instante abrazarte, acariciarte, pasear contigo de la mano y poder mirarte a la cara, a los ojos y decirte lo mucho que te adoro.